Cuando tenemos un ligero malestar en el estómago nos tomamos una manzanilla, cuando tenemos gases optamos por una infusión de hinojo y cuando no podemos dormir nos preparamos una tila.
Las infusiones de plantas son un recurso eficaz y al que acudimos a menudo.
¿Pueden tomar infusiones los niños?
Al igual que en el embarazo se desaconsejan muchas infusiones, los niños tampoco deberían tomarlas ya que no se han estudiado los efectos que éstas provocan. Además se sabe que muchas de las sustancias empleadas en infusiones (anís estrellado, hinojo, eucalipto...) pueden llegar a ser tóxicas en determinadas cantidades o que pueden contener sustancias que impidan que el hierro se absorba y, por lo tanto, provoquen anemia (es el caso del té o la manzanilla por ejemplo).
Pero existen infusiones infantiles ¿No son beneficiosas?
Muchos habréis visto en vuestra farmacia unos botes redondeados donde pone "infusión instantánea a base de plantas". Y habréis visto que hay 3 tipos: digestiva, relajante y laxante.
Pues bien, leamos el etiquetado para que veáis qué es lo que estáis comprando.
Antes de nada recordar que el consumo de azúcar no debe superar el 10% de la ingesta de calorías diarias tal como expliqué en el post de las papillas sin gluten. Así pues, un niño menor de 6 meses no debería consumir más de 18g de azúcar al día. Sabiendo eso ya podemos leer el etiquetado de las famosas "infusiones para niños a partir de los 0 meses".